
Esta vez fue nuestra colaboradora editorial y representante de VOX en Palma, Azra Dobojlic, quien compartió en su Twitter la fabulosa instantánea del vídeo de Óscar Camps, director y fundador de la polémica ONG ‘Open Arms’, el barco que lleva dos semanas navegando por el Mediterráneo con 147 personas a bordo ¿Lo más sorprendente de la imagen? Que mientras denunciaban que la tripulación vivía al límite y en una situación de auténtica "emergencia humanitaria" en la que ya incluso escaseaban los alimentos, los inmigrantes disfrutaban de una súper televisión de pantalla plana último modelo. Increíble el descubrimiento.

Los inmigrantes del Open Arms: emergencia humanitaria pero con un plasma de 50. ¡Fachas, que sois unos fachas!
— MEDITERRÁNEO DIGITAL (@MediterraneoDGT) 20 de agosto de 2019
@AzraVox pic.twitter.com/sAAw6pqsxj
Escasos momentos antes de que se ordenara por un fiscal italiano el secuestro del barco, el fundador de la ya demandada ONG espetó en sus redes sociales que resultaba “indispensable priorizar su salud y seguridad en esta emergencia humanitaria”. ¿Por qué entonces gastaron el dinero en dotar al barco de tecnología de última generación pero tuvieron que esperar a que llegase el todopoderoso y salvador Richard Gere a llevarles comida? ¿Acaso era más importante para estos progres tener a la tripulación entretenida en lugar de tener saciados sus estómagos y aseados sus cuerpos?
Lo más lamentable aun ha venido de la mano de la afirmación de Camps en su último Tweet: “(…) Se incautará el barco temporalmente, pero es un costo que @openarms_fund asume para asegurar que las personas a bordo puedan ser atendidas”. ¿Acaso su razón de ser no era precisamente utilizar el dinero de la fundación para atender a personas desfavorecidas en lugar de gastarlo en televisores de plasma? ¡Que se os ve el plumero!
Vox denunciará a la ONG
Tal y como les informamos esta misma mañana, Santiago Abascal anunció a través de un matutino Tweet que VOX denunciaría a la ONG “por favorecer la inmigración ilegal y por el uso fraudulento de las leyes del mar”. Una advertencia que se ha materializado rápidamente presentando la denuncia ante la Fiscalía General del Estado español contra la organización ‘Open Arms’ por presuntos “delitos de infracción de la Ley Marítima y colaboración con organización criminal para el tráfico de personas, tipificado en el artículo 570 del Código Penal” español.
¡Madre mía los menores del #OpenArms! pic.twitter.com/ny8x9AXS05
— MEDITERRÁNEO DIGITAL (@MediterraneoDGT) 19 de agosto de 2019
Ahora el Gobierno se apunta a la piñata
El miércoles de esta semana está dando para mucho. Tanto como para que la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, ahora sí haya recordado que el barco de esta organización no tiene licencia para realizar rescates en el mar Mediterráneo. De hecho, la socialista ha apelado, en la entrevista que la Ser le ha realizado, al cumplimiento de la ley cuando fue preguntada sobre las sanciones que la ONG podría recibir, que podrían ir desde los 300 mil hasta casi el millón de euros.
Ahora sí parece que “nuestro país es un estado de derecho y las instituciones, poderes públicos y ciudadanos estamos sometidos todos a las leyes” pues “nadie está a salvo de esto” (nunca mejor dicho), “incluido un barco”. ¿Quedará en agua de borrajas la propuesta de Pedro Sánchez de recibir a la embarcación en nuestro puerto de Algeciras bajo el pretexto de una emergencia humanitaria? ¡Menudo mareo para el buque de la Armada española ‘Audaz’!
Sin duda, un mar de dudas y contradicciones sobre una cuestión tan lamentable como resulta el posible tráfico de seres humanos, a expensas de que la Justicia de nuestro país así lo confirme. Eso sí, recomendamos encarecidamente a ‘Open Arms’ que disfracen un poquito más su doble moral e inviertan más en provisiones que en tecnología avanzada para sus buques de salvamento.