El Real Madrid se ha pronunciado por primera vez desde que estallara la polémica por el 'Caso Negreira', unas investigaciones y sospechas de corrupción que han provocado la denuncia de la Fiscalía contra el FC Barcelona, Josep Maria Bartomeu y Sandro Rosell, entre otros altos directivos.
En un comunicado, el conjunto blanco asegura que "ante la gravedad de las acusaciones formuladas por la Fiscalía de Barcelona contra el F. C. Barcelona y dos de sus presidentes por las sospechas fundadas de corrupción y sus relaciones con quien fuera el vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros, José María Enríquez Negreira, el presidente ha convocado con carácter urgente a la Junta Directiva mañana domingo 12 de marzo de 2023 a las 12:00 h, a fin de decidir las acciones que el Real Madrid estime oportunas en relación a este asunto". En esa reunión el club estudiará si se persona como acusación particular en el caso.

Se trata del primer comunicado sobre el tema que hace público el Madrid, que en las últimas semanas ha preferido guardar silencio hasta ver hacia dónde iba la investigación y no fue parte del comunicado conjunto que hicieron todos los clubes de LaLiga. Una decisión que extrañó en parte de su afición, que durante el clásico de la Copa del Rey llenó los aledaños del Bernabéu de billetes de 500 euros con la cara de Laporta y coreó en el partido cánticos con el lema "¡Corrupción en la Federación!".
Ahora que los pasos de la Justicia están dados, que la denuncia es oficial y que las acusaciones de la Fiscalía contra el club catalán son tan graves, este domingo la Junta Directiva de Florentino Pérez tomará una decisión.
A pesar de la rivalidad histórica entre Madrid y Barça, la relación entre las directivas es una de las mejores que se recuerdan. Florentino y Laporta, que tuvieron la famosa comida de dirigentes antes del último clásico del Bernabéu, tienen un trato cordial, se han lanzado mensajes de apoyo durante los últimos años y les une el proyecto de la Superliga, del que son los únicos supervivientes junto a la Juventus italiana.
La Junta Directiva de este domingo puede marcar un antes y un después en esa relación entre presidentes y en la tímida contundencia que ha tenido el Madrid hasta ahora para denunciar el caso. El futuro de Laporta como máximo mandatario del Barça pende de un hilo, investigado por la Fiscalía, la presión de la UEFA sobre el conjunto culé va a más y el castigo final de la Justicia sobre la organización azulgrana podría ser tan duro económica y deportivamente como para hacerle olvidar proyectos como la Superliga.
