Las cámaras del Congreso de los Diputados han grabado a la diputada de ERC Teresa Jordà hurgándose la nariz en pleno debate de investidura. Unas imágenes que ya se han viralizado en redes sociales y que han llevado a los internautas a compartir decenas de memes.
Como se aprecia en el vídeo que acompaña a estas líneas, la diputada independentista fue grabada metiéndose el dedo en la nariz mientras hablaba con su compañera de bancada. Los hechos ocurrieron este martes, 26 de septiembre, tras la intervención de Gabriel Rufián en la primera jornada de la sesión de investidura de Alberto Núñez Feijóo.
Memes en redes sociales
«Ya sabemos dónde escondió ERC las urnas el 1 de Octubre. Esta diputada del partido de Rufián nos lo muestra en directo», «¿no estaban prohibidas las prospecciones petrolíferas en España?» o «cuando no encuentras la República de Cataluña» son algunos de los mensajes que han dejado los usuarios de Twitter en respuesta al polémico vídeo.
Las imágenes fueron captadas tras la intervención de Rufián, que dejó claro que «una amnistía por el 1-O debe sentar las bases para que se produzca un nuevo 1-O». En la misma línea se pronunció Míriam Nogueras, de Junts, que señaló que si había acuerdo tenía que ser «histórico».
En el momento en que Rufián se preparaba para lanzar críticas al candidato a la presidencia, las cámaras capturaron a Jordà hurgándose la nariz sin ningún disimulo. Este gesto no pasó desapercibido para los espectadores y generó comentarios en las redes sociales. A pesar del momento incómodo, sus compañeros de ERC continuaron aplaudiendo la intervención de Rufián, dejando una impresión mixta sobre la escena.
Tengo una duda ¿la diputada de ERC pone la mano en la oreja porque cuando está empujando el moco con un dedo de la otra está esperando que salga por esa oreja? pic.twitter.com/3TmLFce51d
— Froilán I de España 🇪🇸 (@FroilLannister) September 26, 2023
El Congreso de los Diputados es un escenario formal y solemne, donde se discuten asuntos de importancia nacional. Sin embargo, este incidente sirve como recordatorio de que, a veces, la cotidianidad puede hacer acto de presencia incluso en los lugares más inesperados. La diputada Jordà, tras el episodio, no ha emitido comentarios públicos al respecto, y la atención vuelve a centrarse en los temas de debate en la cámara legislativa.
