La expresidenta del Parlament, Núria de Gispert, ha mostrado una vez más su incontinencia verbal en Twitter y su desprecio público por Inés Arrimadas, a quien ha invitado de nuevo a marcharse de Cataluña... por tercera vez.
Fue ayer, durante la intervención de Arrimadas en el debate de política general, donde la líder de la oposición, y partido más votado en las últimas elecciones autonómicas, nos dejó una de las imágenes de la jornada, sacando una bandera de España desde la tribuna del Parlament.
En su discurso, la dirigente de Ciudadanos reprochó el desastre económico del 'procés', y la incesante fuga de empresas de Cataluña por culpa de la tensión independentista.
Tras calificarla públicamente de "inepta e ignorante", De Gispert aseguró que Arrimadas "no sabe de economía, no sabe de inversiones, no sabe de nada". "¡Se debe encontrar muy mal en Cataluña! ¡Debe añorar su pueblo! ¿Quién la obliga a estar aquí?".
La diputada Inés Arrimadas És una inepta i ignorant. No sap d’economia, no sap d’inversions, no sap de res. I sempre fa un mateix discurs derrotista. Es deu trobar molt malament a Catalunya! Deu enyorar el seu poble! Qui la obliga a ser aquí?
— Núria de Gispert. (@nuriadgc) 3 de octubre de 2018
No es la primera vez que De Gispert manda de vuelta a "su pueblo" a Arrimadas. La primera vez lo hizo en noviembre de 2017, cuando le dijo que por qué no volvía a Cádiz si no estaba de acuerdo con el proceso independentista. En aquella ocasión, el portavoz de la formación naranja en el Congreso, el catalán Juan Carlos Girauta, la tildó de "supremacista" y afirmó que su comportamiento daba "vergüenza ajena".
El supremacismo y la xenofobia en un tuit. pic.twitter.com/VnsvCTIDOA
— Jordi Cañas (@jordi_canyas) 3 de octubre de 2018
La segunda ocasión en la que la expresidenta del Parlament cayó en el mismo error fue durante el pasado mes de mayo y pese a que el año anterior había acabado diculpándose tras las críticas recibidas: "Lamento lo que le he dicho a la Sra. Arrimadas. A veces, tendré que contar hasta diez". Parece que esta vez, tampoco ha contado. Y ya van tres.
Es tanto el odio, la inquina y la rabia que sienten hacia todo lo que represente a España que no se pueden contener. La revolució dels somriures.
