El ex president de la Generalitat Artur Mas ha vinculado el caso del 3% y las imputaciones de cargos del PdeCat -antigua CDC- por la consulta del 9-N a una campaña de "los poderes del Estado" contra "la libertad de Cataluña".
El ex mandatario, sin mencionar la información que avanza hoy El Mundo sobre un testigo que le implica en la trama de presuntas comisiones ilegales a su partido, ha sostenido que el objetivo del Estado es "destruirnos" a base de convertir en "delitos cualquier prueba". Al acto ha acudido también Germà Gordó, ex conseller de Mas y señalado también por el mismo testigo y los investigadores del 'caso 3%' como parte de la trama de presuntas comisiones a cambio de obra pública.
Ovacionado por unas 500 personas durante la presentación del PDeCAT en Barcelona, el ex president ha vinculado toda acción contra él y su partido a un intento de "debilitar y destruir" al partido. Una supuesta campaña del Gobierno que arrancó hace cinco años cuando, aún siendo CDC, abogaron por sumarse a las reivindicaciones por la independencia de Cataluña. "Cuando tomamos el camino de la libertad de Cataluña, empezamos a molestar de verdad. Ellos [el Gobierno] también saben que sin el PDeCat no será posible. Por eso intentarán debilitar o destruir".
Mas, que ha evitado hacer declaraciones a los medios sobre la información que avanza hoy este diario, también ha advertido a los dirigentes del PDeCAT sobre futuras acusaciones. "Id con cuidado y no les deis ninguna excusa", ha denunciado. "Cualquiera cosa la convertirán en una prueba y eso en un delito, aunque no esté dentro de las leyes", ha sostenido.
El ex president ha aprovechado al acto para llamar a la movilización del independentismo si el Gobierno acaba aplicando el artículo 155 de la Constitución y suspende la autonomía catalana. Si dieran ese paso, ha advertido Mas, "que vayan con cuidado porque se encontrarán con la reacción de la sociedad". Una movilización "contundente y pacífica", ha especificado, para demostrar que los catalanes "han perdido el miedo".
