
El Gobierno tiene decidido seguir adelante con el proceso de exhumación de Francisco Franco pese a la “posición obstruccionista” del prior del Valle de los Caídos, Santiago Cantera, que se niega a colaborar. Así lo han manifestado fuentes de Moncloa después de conocerse que el religioso no permitió acceder al dar el permiso al Gobierno para sacar los restos de la abadía.

En la información publicada por varios medios se apunta que el prior habría dado su segunda respuesta negativa al Gobierno el pasado 26 de diciembre después de que dos semanas antes la ministra de Justicia, Dolores Delgado, solicitara la preceptiva autorización para entrar en el templo a las más altas instancias de la Iglesia Católica. Según El País, el prior argumenta que falta el consenso de la familia Franco y que el asunto está aún pendiente de pleitos judiciales. El Gobierno ha salido al paso de la noticia asegurando que ya conocía la situación y que era de esperar la posición de Santiago Carrera.
El Ejecutivo de Sánchez “esperaba esta actitud por parte de este religioso”, tras lo cual recuerdan sus “antecedentes ideológicos” conocidos públicamente pero que recuerdan de manera sucinta: “Este religioso, antes de ingresar en la Orden de los Benedictinos, fue candidato a las elecciones generales de 1993 y a los comicios europeos de 1994 por el partido Falange Española Independiente”.
De hecho quitan hierro a la nueva negativa de Carrera a dar autorización para exhumar a Franco porque ya se ha negado en distintas ocasiones a seguir las indicaciones dadas por las autoridades eclesiásticas españolas, según le consta al Gobierno.
Tras reafirmar que esta “posición obstruccionista” del prior “no impedirá que el proceso siga su curso”, lanzan un aviso a la Iglesia, al advertirles de que corren el riesgo de que “la opinión pública pueda llegar a considerar” que “avala en su conjunto la negativa de este antiguo candidato falangista”, posicionándose del lado de la “propia familia Franco”.
La decisión de exhumar al ex Jefe de Estado, aunque pueda llevarse a cabo con retraso,seguirá adelante “respetando cada una de las garantías a las que tiene derecho la familia Franco por ley”, asegura el Gobierno. Pero desde Moncloa también tienen la intención de llevar la negativa de Santiago Cantera, mediante los “requerimientos legales” oportunos, a “las instancias superiores del prior”.
La exhumación de los restos de Franco está siendo uno de los quebraderos de cabeza del Ejecutivo, que ha tenido que sortear diversas crisis al respecto, cambiando de opinión en asuntos como el futuro del mausoleo, y a diseñar un proceso legal que conjugue el objetivo de la exhumación con los derechos de la familia y la necesidad de no acabar generando "un nuevo lugar de exaltación".
