En el manifiesto de 24 páginas que ha dejado escrito Tobias R, de 43 años y autor de la doble matanza de Hanau, trata de justificar sus crímenes. Según el periodista alemán Peter Neumann, experto en terrorismo del King's College de Londres, el texto atestigua un "odio a los extranjeros y a los no blancos" en medio de referencias a películas de Hollywood, mujeres y la selección alemana de fútbol, según revela el diario germano Bild.
"Hace un llamamiento al exterminio de varios países del norte de África, Oriente Próximo y Asia central", usando "términos explícitamente de eugenesia, afirmando que la ciencia demuestra que algunas razas son superiores", explica en Twitter.
Caso aislado: un perturbado mata a 11 personas en Alemania
La Fiscalía alemana ha confirmado esta tarde que ha encontrado junto a su cuerpo un "vídeo" y "una especie de manifiesto", que contiene "pensamientos perturbados", "abstrusas teorías conspirativas" y emanaba "racismo", según el fiscal general Peter Frank.
Por otra parte, el supuesto autor dice haber sido "vigilado toda su vida por los servicios secretos" y se describe como un "soltero involuntario", confesando "no haber tenido nunca una relación con una mujer", continúa Neumann.
Un caso aislado
Se equivocan. Igual que cuando un islamista perpetra una matanza en Europa o Estados Unidos en el que mueren cientos de cristianos, para los medios de comunicación o la opinión pública se trata de un 'lobo solitario' o un perturbado que nada tiene que ver con el terrorismo ni con la religión, que un hombre mate a 11 personas no debería vincularse directamente a ninguna ideología ni filiación política concreta. Siguiendo con la misma analogía progre, es un caso aislado. Ni racismo ni xenofobia.
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