
Les pagan con su misma moneda. Las principales organizaciones independentistas lanzaron durante los últimos días llamamientos a dispersión para que sus acólitos llenaran de lazos y colores amarillos, por la liberación de los supuestos 'presos políticos', las cabalgatas de toda Cataluña.

Una constante que se ha venido repitiendo machaconamente durante todas las Fiestas de Navidad. Primero, pidieron dejar las calles sin luces en señal de protesta por la 'represión' del Estado. Después, llenaron de lacitos los pesebres, puentes y árboles navideños de todos los pueblos y ciudades del territorio. Incluso en vísperas del 25 de diciembre, abanderaron una campaña para dejar 'una silla libre' en todas las comidas y cenas de Navidad. Surrealismo puro 'made in Catalonia'.
Miles de frikis independentistas colocan una silla con un lazo amarillo en la mesa de Navidad https://t.co/QSx3R29y5j #NadalGroc #Cataluña pic.twitter.com/2Lh7AqrGlj
— MEDITERRÁNEO DIGITAL (@MediterraneoDGT) 26 de diciembre de 2017
Y cuando los soberanistas ya planeaban convertir el Día de Reyes en el enésimo aquelarre público independentista, se encontraron al enemigo en casa. La resistencia de los catalanes sigue siendo el gran talón de Aquiles que ha vencido al separatismo.

Un grupo de jóvenes se organizaron y sacaron numerosas banderas españolas al final de la cabalgata de Badalona, la tercera ciudad más grande de Cataluña. Cuando la comitiva principal encaraba ya la recta final de trayecto, ondearon las banderas al viento y entonaron numerosos gritos de 'Viva España' o 'Yo soy español'.
@CiutadansCs de #Badalona. Al matí el regidor criticava anar de groc a la cavalcada “per afectar la convivència” i a la nit els seus amb pancartes a la cavalcada increpant a la gent a crits. No espero que demanin disculpes. Només que pensin una mica més abans de fer el ridícul. pic.twitter.com/ys3QQiS1ET
— Ferran Falcó (@ferranfalco) 5 de enero de 2018
Como era de esperar, la actitud de los manifestantes molestó a a parte del público. Hubo pitos, silbidos y numerosas palabras malsonantes. Al final, fue necesaria la presencia de efectivos de la Guardia Urbana para evitar que la tensión fuera a mayores.

A @Cs_Badalona le debería dar vergüenza enviar a menores adoctrinados tras la cabalgata de reyes a lucir su bandera y politizar una fiesta infantil. Estara orgullosa @InesArrimadas de sus lacayos de #Badalona #nitdereis #Catalunya #adoctrinament pic.twitter.com/2Wa2bVyDyE
— FisgonaDeBarrio (@FisgonaDeBarrio) 5 de enero de 2018
Los independentistas, expertos en mezclar la política en cualquier orden y situación, incluso con niños de por medio, se han tomado rematadamente mal esta actuación, e incluso han acusado públicamente a Ciudadanos y al Partido Popular de estar detrás del incidente. Siembra vientos.
