Aquelarre separatista y amenazas a España con el regreso de Puigdemont a Waterloo

"Este no es el final de mi viaje. Viajaré hasta el último rincón de nuestro Continente para defender la causa justa del pueblo catalán", han sido las primeras palabras del ex presidente Carles Puigdemont en su regreso a Bruselas. En una rueda de prensa, junto al presidente de la Generalitat, Quim Torra, ambos se han mostrado victoriosos tras la decisión de la Justicia alemana de rechazar el delito de rebelión. "El Estado español ha perdido esta batalla y vendrán más", ha afirmado Torra.

Carles Puigdemont ha llegado a Bélgica después de haber pasado los últimos cuatro meses en Alemania, donde fue detenido en marzo y ha estado pendiente de que Tribunal Superior de Scheswig-Holstein resolviera sobre la euroorden dictada por el Tribunal Supremo español contra él.

El ex presidente ha asegurado que su regreso es un "día de sentimientos contrapuestos". Por un lado, ha expresado un sentimiento "de alegría" por reunir "al Gobierno destituido por el 155 y al Gobierno que acabó con el 155". Y, por otro, porque "hoy se demuestra la vergüenza de tener presos políticos y exiliados".

En este sentido, Puigdemont ha exigido a España que "se alinee" con el resto de Europa en los referente a los presos. En el mismo tono se ha pronunciado Torra que ha afirmado que "no pararemos hasta que los presos sean libres, los exiliados regresen y el pueblo de Cataluña decida en las urnas libremente su futuro".

Por su parte, Puigdemont ha instado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a que "haga los deberes este verano" y ha añadido que "no se puede querer los votos para convertirse en presidente y luego no actuar en consecuencia".

"Esperamos que el presidente Sánchez aproveche el verano para hacer los deberes que tiene pendientes". El periodo de gracia se acaba también para el presidente Sánchez", ha advertido el ex presidente. "No nos resignaremos a esta falsa normalidad", ha sentenciado.

Con ello, Torra ha asegurado por su parte que "en el diálogo con Sánchez hay que pasar de las palabras a los hechos". "Estamos esperando a ver cual es la receta Sánchez ante lo que él también reconoce que es un problema político", ha insistido Puigdemont.

Puigdemont ha llegado alrededor de las 9.45 horas a la Delegación del Govern en Bruselas y se ha encontrado con el presidente de la Generalitat, Quim Torra, y con los ex consellers Toni Comín y Meritxell Serret, ahora delegada de la Generalitat en la capital belga.

Para celebrar su vuelta a Bélgica, donde Puigdemont se mudó tras la proclamación de la República en el Parlament para evitar comparecer ante la Justicia, el actual presidente de la Generalitat, Quim Torra, y una delegación de diputados de JxCat se desplazarán a Waterloo, al sur de Bruselas, donde Puigdemont estableció su nueva residencia.

El ex presidente catalán adquirió en esta localidad del Bravante Valón un chalet que su entorno ha bautizado como 'Casa de la República' y que se ha convertido en el centro de operaciones del Govern que fue cesado en aplicación del artículo 155 de la Constitución.

Allí se han reunido los ex consellers Toni Comín, Lluís Puig, Meritxell Serret y Clara Ponsatí, y el propio Puigdemont, con otros líderes políticos que les han visitado después de que eludieran comparecer en el Supremo como sí hicieron otros miembros del Govern cesado.

Durante el periodo que Puigdemont ha pasado en Alemania -primero en la prisión de Neumünster y luego, tras su puesta en libertad, entre Berlín y Hamburgo-, la ex consejera Ponsatí ha dejado Bélgica y se ha trasladado a Reino Unido, donde ejerce de profesora universitaria en Escocia.

Además, la formación de un nuevo Govern con la investidura de Quim Torra ha propiciado que Serret, ex titular de Agricultura, fuera designada delegada de la Generalitat en Bruselas.

También arroparán a Puigdemont una representación del PDeCAT encabezada por su presidente, David Bonvehí, y vicepresidenta, Míriam Nogueras, así como el portavoz del partido en el Congreso, Carles Campuzano, y por parte de ERC asistirán la portavoz en el Parlament, Anna Caula; la diputada Gemma Espigares, y el conseller de Asuntos Sociales de la Generalitat, Chakir El Homrani.