
Pedro Sánchez es muy dado a montar todo tipo de mesas. Mesas de diálogo, mesas de reconstrucción, mesa por la paz, e incluso, mesas por la coordinación, esta última encargada de coordinar los distintos ministerios, sobre todo para evitar que trasciendan las discrepancias entre los ministros comunistas de Podemos y los ministros socialistas del PSOE y con la finalidad de no trasladar a la opinión pública la imagen de descoordinación y la de limitar al todopoderoso Pablo Iglesias dentro del gobierno y sus injerencias en otras carteras que no son de su incumbencia.