
La convocatoria de Tsunami Democràtic de una gran concentración (legítima, por otro lado) cerca del Camp Nou el miércoles 18 de diciembre, día del Clásico, encierra un riesgo para el FC Barcelona, en caso de que se produzcan incidentes, sobre todo dentro del recinto del Estadi, que es donde el club barcelonista es responsable en materia de seguridad. El Barça, por el momento, no ha hecho más declaraciones que las de su presidente, Josep Maria Bartomeu, y el vicepresidente primero, Jordi Cardoner, en Milán: respeto por la libertad de expresión, como siempre ha sido, en el Camp Nou. No hay más posicionamiento público del club, cuyos dirigentes, sin embargo, sí están preocupados por lo que pueda pasar.